Hace mucho tiempo mientras en una entrevista valoraba diferentes estilos de decoración, hablé entre muchos otros, dele estilo ecléctico, y me resultó curioso comprobar como una denominación como “ecléctico”, que para mí es un término de uso frecuente, recurrente y muy común dentro del mundo de la decoración, caía con sorpresa en el oído de muchas personas.
Y es que hay términos que son perfectamente conocidos y muy comunes dentro de una disciplina, pero muy completamente desconocidos para el diccionario de todo aquel ajeno a ese mundo concreto, y es posible que esta sea el caso, no del estilo ecléctico, sino de su denominación.
Eclecticismo es un término que proviene del griego “eklegein”, que significa escoger, y en principio es un término filosófico que hace mención a la conciliación de las ideas y de las diferentes visiones de las cosas.
El eclecticismo común es una característica común en los grandes filósofos de la historia, que se ha extrapolado hoy en día a las cualidades personales de personas que están muy relacionadas con la creatividad, la expresividad y la libertad de ideas.
El estilo ecléctico se basa en la mezcla, en la combinación de piezas o técnicas extraídas de diferentes estilos, de la recuperación .